Era el sexenio donde se buscaba desde Los Pinos comprar lealtades en medios de comunicación, mientras que los dueños de la prensa y algunos periodistas se dejaban apapachar. Eran tiempos de bonanza para unos cuantos, los de siempre, los mismos que en gobiernos priístas y panistas acumularon fortunas en nombre de la “libertad de prensa”, sin importarles jamás buscar y decir la verdad, sólo halagar al que estaba en turno en la silla presidencial. El expresidente Enrique Peña y su vocero Eduardo Sánchez dispusieron en el sexenio pasado de 52 mil millones de pesos del presupuesto público (más del…