Antes de presentar su renuncia al Instituto Mexicano del Seguro Social (el 21 de mayo pasado), el panista Germán Martínez planeó con mucho cuidado cómo vengarse de aquellos funcionarios del gobierno federal –incluido el mismo presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador– que le hicieron “la vida imposible” al no permitirle meter las manos en las arcas públicas de ese instituto de salud. Acostumbrado a que en gobiernos panistas (Vicente Fox y Felipe Calderón) podía gastar sin escrúpulo ni medida los recursos del erario, Martínez Cázares se quejaba públicamente de la austeridad ordena…